Archivos para febrero, 2023

Hace tiempo escribí algunas entradas donde trataba varios temas a la vez, tituladas: Miscelánea y Peculiaridades Diversas, en ambas llegué hasta la quinta entrega. Pues bien, hoy vuelvo a escribir sobre varios asuntos que trataré de darles coherencia y siguiendo el hilo vuelvo con el título de Peculiaridades Diversas, en este caso la VI. Estando hurgando entre los papeles de mi oficina, con cierta nostalgia emigraré a la biblioteca de casa, encontré más de un centenar de tarjetas de presentación. Hoy es raro que alguien extienda su mano para ofrecernos la suya. Prefieren las redes sociales y el Air Drop para «transmitirnos» sus datos. La selección como dije antes, es amplia, desde direcciones y teléfonos locales hasta lugares tan alejados como Argentina y Francia, vivo en México, para quienes me leen en España que les quedan a un paso los franceses.

Leo en la primera tarjeta de presentación: Paseo de compras, dos números de teléfono celulares y un correo electrónico en la parte inferior, un taxi dibujado de costado y el nombre de Daniel Abrahim Chá. Un buen hombre que conocimos la primera mañana de nuestro viaje a Buenos Aires, recorriendo con mi esposa alguna bulliciosa calle cerca del hotel donde nos hospedamos. Después de nuestra tormentosa llegada la noche anterior, cuando abordamos un taxi del aeropuerto. El chofer; un tipo (el reverso de la moneda) nos quiso estafar contándonos una triste historia sobre su pequeña hija enferma y hospitalizada desde hacía mucho tiempo. Después de dar varias vueltas en círculo, sin que pudiéramos llegar al hotel y engordando la cuenta del taxímetro. Con una cara larga quería saber si podíamos cooperar con algunos dólares para el tratamiento médico de su criatura… Daniel, un uruguayo dispuesto a llevarnos hasta el último rincón de aquella ciudad porteña, aunque debo de reconocer que tenía algunas lagunas sobre los lugares más turísticos. Un día cerca de las doce nos llevó a un bar, pensando que se trataba de un museo. Otro día le hice una pregunta capciosa: ¿Conoce la tumba de Borges..? Sí debe estar en la Recoleta… Cuando en realidad estábamos a miles de kilómetros de distancia.

La segunda tarjeta: Bodegas de los Reyes, Javier Hernández Zufía, gerente, calle de los Reyes 6. Una tienda de vinos en el corazón de Madrid. Entré una mañana solo, apenas pude ver al fondo que limpiaban afanosamente lo que quedaba de una cata multitudinaria de la noche anterior. De los vinos francamente no me acuerdo, pero no se trataba de los que encuentras en cualquier tienda.

Gabriel´s Wine & Spirits, Brian Tarver, 445 Walzem Rd. San Antonio Texas. Una extensa tienda de vinos y licores rumbo a Austin. Llevaba ya algunas botellas en el carrito cuando mr. Traver se acercó a romper el hielo. Por mi parte lo desafié diciéndole: If you have a Petrus for less than one thousand bucks, I will buy it… Ni tardo ni perezoso me trajo una 2001. Que dicho sea ya pasó a la historia en la cata 234. Hoy en día no podría comprarla por ese precio ni de broma. Y hablando de costos y precios… Acabo de leer en la página 87 de The World Atlas of Wine octava edición, de Hugh Johnson, que el costo de producción de un vino segundón de Burdeos (second growth) es de 16€. A pesar de que los «segundones» resulten muchas veces mejores que los premier cru es un negocio muy lucrativo, tomando en cuenta que hoy no bajan de 200 dólares, pongamos de ejemplo un Pichon Longueville o un Rauzan-Segla.

Caja de Ahorros del Mediterráneo, Antonio Tellez alias Bosconio. Hombre entusiasta, miembro de Verema.com al igual que yo por los inicios del año 2001, y a quien conocí tres años más tarde en la bella ciudad de Valencia. Una sabrosa charla como viejos amigos, degustando una docena de copitas, exquisitos platillos, eso sí de tamaño de dedales, y al final un puro cortado por la sumiller segundo lugar nacional de España.

Aunque aparezca en la tarjeta el nombre de Ana López Cano, Vinos Finos R. López Heredía Viña Tondonia S.A. Av. de Vizcaya 3, conocí en persona a la señora María José López Heredia. Aquí si quisiera extenderme, ya que el año anterior, 2004, había conocido la bodega pero no había tenido la fortuna de platicar con ella, tenía de visita a un grupo de esos que compran para importar varias cajas a su país. Fuimos atendidos muy amablemente en aquella ocasión pero no tuve el gusto de conocerla . Volví aquel verano de 2005 y no sólo la conocí, sino que coincidió con su aniversario. Para celebrarlo sacó de la bodega un Bosconia 1968. Agradeceré toda la vida su generosidad y aquellos bellos instantes que tuve la fortuna para charlar con ella y ser inmerecidamente obsequiado con un Bosconia y un Tondonia ambos añada 1964, año en que llegué a este caótico mundo. Todavía guardo el Bosconia para mis 60 años. Fue una tarde inolvidable.

Muy cerca de allí, en La Serna. Viñedos Del Contino, S.A. Jesús Madrazo Mateo, enólogo y parte toral de la bodega. Gran anfitrión y un buen amigo. Me acuerdo que observando pasmado el pago de Viña del Olivo, bautizado así por el majestuoso árbol que extiende sus ramas sobre algunas vides, le pregunté si podían reposar mis cenizas algún día al pie de ese olivo. Jesús me miró asombrado asintiendo. Pero yo en son de broma le dije que al final no sería buena idea que quienes compraran ese vino a partir de esa añada, se llevaran mis recuerdos en cada copa.

Berry Bros & Rudd, Wine & spirit merchants, Matthew Foster. Al leer los datos de esta tarjeta recuerdo que caminaba en medio del frío, era muy temprano y el avión salía de regreso en 4 horas. Así que caminando como dicen los ingleses down the street entré a la primera tienda. Todos sentados en sus estrechos escritorios con su diadema pendientes al teléfono. Más tarde me enteré de que se trataba de una comercializadora de vino por mayoreo. Así que seguí mi camino hasta llegar a una de las tiendas de vino más viejas de Londres, 325 aniversario hasta hace poco, más aún que el Museo Británico. No debe faltar la sección de whisky y el piso viejo de tablones de madera. Compré sino mal recuerdo un par de borgoñitas de medio pelo.

*Por cierto, unos días después de esta entrega, leyendo Churchill A drinking Life, un librito ameno y divertido sobre las andanzas de Sir Winston Leonard Spencer Churchill, me entero de que esta tienda era una de las que surtía de champán, y otras cositas al gran bebedor de Churchill.

Agricultura e Vinhos * Quinta Do Mouro, Miguel de Orduna Viegas Louro. En seguida vienen a mi mente varios recuerdos de aquel inolvidable viaje. Empecé en el congreso de Verema en Talavaera de la Reina, de allí me desplacé a Extremadura, cuyo anfitrión Antoliano Davila me llevó a conocer varias bodegas en Alentejo, Portugal. Quinta Do Mauro fue una de ellas. Día soleado y ambiente campirano, me llevé muy buenos recuerdos de esa visita, comimos en Elvas, en el famoso restaurante El Cristo un exquisito bacalao capeado, un kilo de almejas en mantequilla bañado con una garrafa de vino verde.

Joe Saglimbeni Fine Wines, 638 Rhapsody, San Antonio, TX 78216. Una tienda no muy grande, enclavada en una tranquila zona arbolada, en un vecindario de clase media. Esta tienda hasta hace poco era atendida por sus dos dueños, dos hermanos ya mayores: uno en la caja y el otro en los pasillos orientando a los clientes. Los pasillos estrechos con botelleros a ambos lados y parecidos al laberinto del Minotauro. Tienen una muy buena selección de vinos en general y champán y vinos de postre en particular. Un verdadero placer entrar y disfrutar de la selección de vinos a la vista, allí compré mi sacacorchos Laguiole de mango de cuerno negro.

Creo que habrá una segunda entrega, hay todavía muchas tarjetas que me traen buenos recuerdos. ¿Qué seríamos sin la memoria…? de la poca que aún conservo.